top of page
LA LOCA SATURADA

 

Te resultaría fácil el insulto. Porque un Guardia Civil puede recibir tantos como un árbitro en un partido de fútbol. Que es verdad que todos nos acordamos de su madre si están en una carretera con un radar camuflado en el punto más idiota y tienen la caja de caudales abierta para que los rápidos, despistados o como conduzcamos ese día le vayamos echando billetes porque monedas no aceptan. Y te acordarías de ellos si al revés, en algún momento de tu estúpida vida, tuvieras que necesitarlos. O quizá no. Y prefieras a Chuck Norris o Steven Seagal. Pero es que entras a saco con "picu leto". Faltando para empezar, insisto. Por eso te correspondo, pero con nombre y apellidos. Este picu leto al que te diriges es mi amigo, aunque tuvimos nuestro choque por cuestiones de carácter que nos llevó a pasar un tiempo sin hablarnos. Pero por eso somos amigos, porque al final sabemos hablar. Y lo conozco. Has entrado mal colega. Porque este individuo al igual que el resto de verderolos del GREIM (Grupos de Rescate en Montaña de la Guardia Civil) se han dedicado a salvar vidas. Jugándose la suya sin que sea un tópico lo que te digo. Solo por eso, por expresarte como has hecho escondido, ya me caes mal. Así que espero que me dediques también santos comentarios porque además de acompañarlo en cinco aperturas al Naranjo, mi profesión también va ligada al salvamento. Vete pensando como me vas a llamar. Te doy una pista a ver si lo pillas: va de manguera pero también hay altura. 

 

El problema es largar por largar. Andrés no nació debajo del Urriellu o Naranjo, como más guste, pero su vida de montañero y rescatador pasó infinidad de veces por sus verticales y tu picu leto se siente como en casa con total normalidad, sin chulear que tiene la más bonita de todas. Te aseguro que no le va en el alma tener el record en nada y menos en el dichoso Pico, hasta el punto que se enteró de algunas cosas años más tarde cuando estaba a punto de cumplirse el centenario de su escalada y aparecieron revistas con monográficos y libros que hacían cuentas. Estadística se dice, por si no te enteras. A Villar le puede la inquietud con líneas que abren un nuevo camino. Sencillamente por explorar, por alma aperturista. Porque no se resiste a meter un clavo en una grieta que lleva a la cumbre y que a nadie se le ocurrió pasar por ahí o si se le ocurrió no lo hizo porque lo suyo no es abrir. Que da su curro colega y el camino nunca es claro y a veces da miedo o porque pasa de abrir en el Urriellu. Fíjate que en la cara oeste, donde hay una maraña de vías, todavía se han abierto algunas en los últimos años y por allí mi colega no se ha metido salvo para repetir. Y no por falta de huevos para abrir. Vamos, ni lo dudes. Como ha dicho Andrés sus vías están en zonas que no se habían tocado. Además la próxima vez que vayas llévate unos prismáticos y dime si ves alguna cremallera o escalera instalada por donde pasó y que refleje malas artes en la caliza. Capullo, que al final se resume en una línea pintada sobre una fotografía y los spit en sitios tan justos que muy pocos aventurados se van a decidir volver a tocar.No te ha contado su vida como replicas en tu segundo comentario. No lo hace de cualquier manera porque desde que lo conocí, lo que sé de él fue de lo que escuché, leí o de las pocas cosas que consigo sacarle.

 

Y a ti, querido imbécil, que no te conoce de nada y menos escondido detrás de un anónimo, te dirá menos.La última que conseguí saber fue una anécdota en la Sur, cuando tu picu leto con licencia para sobreexplotación, estaba de instructor hace unos quince años con el curso de una nueva promoción del GREIM. Después de rapelar la pared le recomendó a unos escaladores primerizos en el Naranjo ponerse el casco a pie de vía. Uno de ellos le preguntó con gesto de menosprecio y chulería el por qué. Quizá viéndolos como Guardias Civiles, aunque fuesen de montaña, como una orden más que una recomendación y pareciese que hasta ahí podían dominar y amedrentar el territorio. El caso es que cayó un pedrusco de arriba que hizo encoger de hombros al personal. Por este motivo, respondió tu picu leto. Y no hubo más palabras.Cuando vuelvas por el Naranjo, si vas claro, tienes cuatro caras para escalar y como estoy seguro te conoces todos los croquis de las vías, no se te ocurrirá meterte en alguna abierta por Andrés Villar. Aun así espero que todo te vaya bien y no tengas un mal día, no vaya a ser que tengan que ir los verderolos a sacarte y tratarte con delicadeza a pesar que por la pinta en las maneras que abordas una crítica eres un auténtico impresentable, sabiendo que por lo que acabo de decirte seré lo mismo para ti y para muchos. Que el problema no es criticar, que para eso se está en la palestra. El problema es cuando se hace tan barriobajero y tan baladí. Aprovecho esto último hacia otro mezclando, ya puestos, churras con merinas, para un paisano que no hace mucho me pedía tomar riendas en otras lides muy diferentes y darle otros aires y que, escuchándolo en la radio municipal, desde luego nunca será siguiendo su ejemplo. Que no es de recibo caerle bien a todo el mundo..

Pues te tocó a ti. Verás, por anónimo y por faltoso. De lo primero solo pequé una vez y no te imaginas como me arrepentí. Me generó hasta remordimientos y doy por redimido mi pecado. La epistolar de esta ocasión va de montañas. Tu anónimo, que me llevo a la guillotina de la tecla, aparece en una página especializada de alpinismo que recoge la última apertura en el Naranjo de Bulnes. Para situarnos en escenario. La verdad es que el seudónimo me desconcierta y no tengo muy claro si tienes el pelo recogido en un moño apretándote demasiado el cerebro o sencillamente eres así de pobre y no puedes opinar de otra manera. Querida Loca Saturada no esperes nada bonito al recibo de estas letras porque las primeras palabras que has puesto en tu comentario son demasiado ofensivas. Lo dicho, por faltoso, que también puede ser maleducado.

bottom of page